bajo la presidencia de don Pablo Cremaschi Furlotti, la Asociación de entonces, modifica sus estatutos y se convierte en el Colegio de Ópticos de Chile
Al correr del tiempo, debido a algunas diferencias de criterios entre algunos directivos de la época y respondiendo a la inquietud de los contactólogos de formar su propia organización, surge el Colegio de Contactólogos de Chile, a la cabeza del Sr. Victorio Iorino.